En mi último viaje a Argentina, Juan Domingo Moumari me regaló una verdadera joya de la tauromaquia, una joya documental gráfico-literaria de las corridas de toros en Argentina, en concreto, de las Corridas de Toros en Buenos Aires; un libro de 1890 que es una verdadera joya documental en la que se reflejan datos inéditos y acuarelas desconocidas.
Las primeras corridas de toros que se celebraron en Argentina se celebraron en los comienzos del año 1600 y se celebraban en las Plazas Mayores de las incipientes ciudades fundadas por los españoles, la primera se celebró en el Río de la Plata.
Buenos Aires tuvo dos Plazas de Toros, la de Montserrate que fue demolida en 1791 y la de El Retiro construída en 1799 de diseño morisco y muy bonita, construída por Francisco Cañete perduró casi hasta 1890, donde hoy está la calle Maipú, cerca del hotel donde me hospedé.
Cuando Argentina se independizó de España, ni los criollos, ni los propios hijos, nietos y biznietos de los españoles querían tener ninguna vinculación con lo que dejaron los virreinatos y prohibieron las corridas de toros, pero bueno, eso es otro cantar, ya hablaré otro día, cuando se tercie y me de la gana, de la independencia de los países americanos, de las distintas historias y teorías que a grandes rasgos se barajan pues ni es cierto todo lo que se dice en España ni es cierto todo lo que se dice en los distintos países Americanos, hay que leer a muchos historiadores objetivos y no objetivos y leer muchos documentos para tener una opinión propia y tal vez mas real de lo sucedido. Solo un atisbo de lo que fue la independencia de cada país en conjunto a grandes rasgos:
En todos y cada uno de los países, fueron los propios hijos, nietos, biznietos de los españoles conquistadores y criollos con sangre española los que hicieron la independencia de cada país, ¿por que iban a pagar tributos a la Corona Española si ellos podían vivir sin tener que rendir cuentas a Reino de España?, ¿Por qué iban a tener que obedecer a unos virreyes cuando ellos solos podían y querían tener el poder?. Fue por lo general la nobleza procedente de la herencia española la que promovió todas las independencias. ¿Quién era por ejemplo el General José de San Martín nada mas ni menos que un Español, hijo de españoles y libertador de Argentina, Chile y Perú, el cual vivió mas en España que en América pero sus ansias de poder hizo querer la independencia de esas tierras para provecho de unos y no de otros?, ¿Quién fue Simón Bolivar nada mas que nieto de unos españoles procedentes de Puebla de Bolívar, Vizcaya y que fueron contadores de Felipe II y posteriormente pertenecientes a la nobleza de Caracas?, Tanto San Martín como Bolivar fueron educados en España donde sus padres los enviaron para recibir mejor preparación, pero luego el ansias de poder hizo que quisieran independizarse de España, algo, por otra parte, lógico y natural en la historia de las conquistas y de los imperios; ¿Quién era Sebastián de Belalcazar nada mas que un español por los cuatro costados y que conquistó casi toda Colombia.......?
Los criollos blancos y los descendientes directos de os españoles, querían la independencia del Reino de España por varios motivos, no pagar tributos, quedarse ellos con el poder y la riqueza y por que siempre ha pasado, el enemigo está en casa y las traiciones se sucedían día tras día. Después de las independencias, casi todas las naciones entraron en una lucha de poder y guerras civiles encarnizadas, hijos de españoles, nietos de españoles, biznietos de españoles, criollos, todos querían el poder de los territorios independizados. Casi todos los países independizados entraron en un caos.
Bueno, sigamos con el tema de los toros en Argentina y Buenos Aires. Cuando Argentina se independizó de España, los descendientes de los invasores, de los imperialistas y conquistadores, prohibieron las corridas de toros y como quedaron sin poder celebrarse, se construyó una nueva Plaza de Toros en el país vecino, Uruguay, concrétamente en la vecina y fronteriza ciudad de Colonia de Sacramento, donde aún sigue en pie su plaza de toros, la cual he podido visitar. Esta plaza de toros se construyó precisamente para que los aficionados de Buenos Aires cruzaran el río y pudieran presenciar las corridas de toros prohibidas en Argentina. Es una plaza de toros de estilo morisco, preciosa, con capacidad para 8.000 personas y que hoy está en estado de ruina.
En Uruguay se celebraban corridas de toros en todo el territorio pero en una de las corridas el torero español Punteret murió corneado en el ruedo en 1888 y se comenzaron a prohibir las corridas en varias partes del país, no como protección a los animales, no, sino, como protección hacia el ser humano, no querían que nadie muriese en un ruedo y en algunas ciudades aceptaron seguir celebrando corridas de toros pero con toros afeitados hasta la cepa o embolados, algo que como es natural, no cuajó durante mucho tiempo pues la esencia de las corridas de toros radica en el peligro, la emoción y el juego de la vida y la muerte, el cual debe estar presente, de otro modo, se pierde la esencia principal, el riesgo.
Siguieron celebrándose corridas íntegras en Uruguay hasta 1912, año en el cual, un catalán (la historia se repite) llamado José Batllé y Ordoñez, prohibió definitivamente las corridas de toros para salvar la integridad física de los toreros por ser muy sangriento, tócate los bolindroquios; posteriormente vino lo del maltrato a los animales.
En la lámina anterior, acuarela descubierta no hace mucho y que data de 1818, se puede ver una corrida de toros celebrada en Buenos Aires en la Plaza de Toros de Buenos Aires donde un torero está haciendo un quite a un picador y el toro está ya banderilleado y con banderillas de fuego, algo totalmente inusual. Al fondo de la acuarela, otro picador con el caballo derribado en el suelo.
Se prohibieron las corridas de toros, pero eso sí, se siguieron celebrando espectáculos taurinos, ya no con toros bravos, los cuales se extinguieron en todos los países donde las corridas de toros se prohibieron, se celebraban con toros criollos y cruzados para celebrar coleos, lanceadores, espectáculos de lazo, etc, los cuales fueron prohíbidos posteriormente en las plazas públicas.
En esta imagen, una litografía de 1830, un novillo marcado a fuego como se hacía en España, de la ganadería del Ganadero Argentino de Campos.
Hoy en día no existe ganado bravo de lidia ni en Argentina ni en Uruguay, ni en ningún país donde no se celebran corridas de toros.
Tan solo hay un vestigio taurino con toros cruzados en Argentina, en la localidad de Casabindo, única manifestación taurina herencia española en tosa la Argentina, donde sale un toro serio, astifino, pero muy, muy cruzado que no sirve para la lidia normal.
Os pongo una colección de imágenes del festejo taurino celebrado en Casabindo, Argentina, único vestigio de la tradición española en ese país. El festejo es como una capea con toros para el los valientes que se atrevan a jugarse la vida. Los toros no se matan.