El diario de mi Clínica prácticamente dia a día. Comentarios y problemas con los que me encuentro, patologías que se me presentan y otros temas podológicos o que no vienen a cuento. Por que me da la gana.

sábado, 18 de septiembre de 2010

El Rubio de la Glorieta (Manuel López Pérez).

Hoy me siento mal, bastante mal, pero tengo unas grandes ganas de escribir, de escribir con lágrimas en los ojos, pero tengo ganas de expresar de algún modo ciertos sentimientos que no quiero ni decir con palabras.

Manuel López Pérez, El Rubio de la Glorieta, mi amigo Manolo, tiene una estocada en todo lo alto de la que es muy difícil se recupere. Manolo ya no quiere luchar, ha luchado demasiado, está cansado, muy dolorido y sin ganas de vivir. Los que estamos a su lado no podemos o no queremos comprenderle, pero Manolo no puede mas. Yo me aferro aún a los últimos halos de esperanza, de una esperanza que Manolo parece haber perdido tal vez por que es mas realista que el resto de los que le rodeamos. Hoy, cuando he estado en el hospital, por primera vez a lo largo de su larga enfermedad, le he visto llorar, le he visto sufrir, le he visto sin fuerzas de seguir viviendo. La sonda del riñón se le salió y empapó su cama, no quería que se la cambiáramos. Vino la enfermera y me pidió que por favor le apretase yo la sonda, cosa que hice y posteriormente entre una auxiliar, su cuñado y yo, le cambiamos la cama empapada en dolor. Manolo no quería seguir sufriendo, Manolo aguantaba pero se agarraba a mi y no decía nada hasta que no podía mas y se quejaba, el dolor de Manolo me desgarraba por dentro, y su hermana Estrella, encendía sus ojos haciendo del momento un monumento al dolor si es que el dolor, en algún lugar del mundo, puede tener un monumento.

Manolo ha luchado con todas sus fuerzas, con toda su alma contra este toro negro del cáncer, el cual, le ha pegado una cornada mortal de la cual es difícil se recupere de nuevo como lo ha hecho otras veces. Dios, este Dios en el que creemos, este Dios en el que Manolo creía y en el que creía su familia, le ha dado una estocada en todo lo alto, pero a Dios solo le queda darle la puntilla, y espero que falle en su primer intento y Manolo se vuelva a levantar. !Qué difícil es creer en Dios en algunos momentos de la vida!, no en el Dios de los católicos, ni en el de los cristianos en general, ni en el de los musulmanes, no, es difícil creer en un Dios universal, en un Dios para todos, un Dios en el que Manolo ya no cree, y la verdad, no es para menos.

Hay a veces en la vida que se te presentan problemas sin buscarlos, inesperadamente, sin querer meterte en ellos, pero se te meten hasta el alma y te destruyen, te destrozan. De un momento a otro la vida cambia, de un minuto a otro, la vida te da un giro de 360 grados, de un segundo a otro, la vida, tu vida, mi vida, puede cambiar drásticamente e inesperadamente sin que uno tenga nada que ver muchas veces con ello. Esto sucede en todos los aspectos de la vida y uno se puede preguntar ¿qué he hecho yo para que me suceda esto?, ¿qué he hecho yo para padecer esta enfermedad?, ¿qué he hecho yo para enamorarme?, ¿qué he hecho yo para que esta persona se enamore de mi?, ¿qué he hecho yo para merecer todo esto?......... y ves que después de tanta pregunta, la mayoría de las veces, no encontramos, yo al menos, no encuentro respuesta.

Muchas veces nos quejamos de vicio y no valoramos todo lo que tenemos, pero cuando ves casos como el de Manolo, ves que la vida no es un camino de rosas y hay que disfrutar de los pequeños momentos que te brinda. La vida no es fácil para muchos y en un momento de máxima felicidad, pasa algo, algo que te la amarga para el resto de nuestros días. El Rubio de la Glorieta lleva muchos años luchando contra este fantasma que se le presentó de repente en forma de cáncer de colon del cual le operaron pero que luego se le metió en el hígado teniendo que extirparle mas de la mitad de el mismo. Pasó unos años relativamente bien, un tanto olvidado de la cruel enfermedad, tan solo preocupado de los resultados de las analíticas periódicas que le hacían, hasta que un día, después de varios años de quimioterapia, radioterapia y demás perrerías, me dice que le duele un pie, que quiere que le mire. Un día quedamos en mi clínica y le miro el pie, le hago unas radiografías, le realizo una exploración de todo y veo que tiene parestesias en diferentes zonas del pie y de la pierna. Había dermatomas que me indicaron que su problema venía de la lumbares, mas concretamente en L3,L4 y L5, le dije que algo tenía que le estaba oprimiendo en esas zonas, que fuese el oncólogo o al neurólogo y lo mirasen. Efectivamente, el diagnóstico que yo creía se confirmó, tenía un tumor oprimiendo las ramas nerviosas de esas zonas. De nuevo comenzó su calvario, calvario que ha seguido con entereza hasta el día de hoy. Desde que fue a mi clínica no han dejado de darle ciclos de quimioterapia, una de las veces, intoxicado por el tratamiento, casi se muere pero salió adelante y comenzó de nuevo con fuerza, pero tanto puyazo ha terminado con que sus huesos son totalmente de cristal, se le parten con la mirada, y sus músculos se han vuelto de mantequilla; ni sus piernas ni sus brazos le sostienen, y lo que es peor, han hecho mella en su fuerza de voluntad, esa fuerza de voluntad que siempre demostró y de la que todos nos admirábamos. Manolo, a lo largo de su larga enfermedad, escribió varios libritos muy amenos, uno de ellos, Cimbelino, es la historia de parte de su vida. Escribió diario de un becerro y tiene, bueno, tenía pensado escribir la segunda parte de Cimbelino, algo que tiene casi terminado según me dio a entender. También durante su enfermedad estudió y se licenció en historia y en filosofía, dos licenciaturas, y estaba con el doctorado, un gran mérito para alguien que estaba tan tocado.

Manolo se muere y hoy he salido llorando del hospital, no podía aguantar sin echar unas cuantas lágrimas. Hoy yo me he dado por vencido al ver su dejadez de ánimo, algo que no quiero aceptar pues nunca se acepta y menos cuando quieres a alguien. Ayer por la noche, cuando fui a verle, se negó a cenar y una de las cosas que mas me marcó es que dijo que casi seguro ya no volvería a ver al niño, refiriéndose a su hijo. También anoche salí llorando del hospital y la verdad, cuando voy hacia él, el freno del coche que me lleva parece estar pisado no queriendo llevarme, y es que en el fondo de mi, hay algo que hace que me retenga, algo que no quiere que vaya a ese lugar; pero no puedo dejar de ir y acompañar a un amigo, no puedo, prefiero tragar ese mal rato y mostrarle mi cariño. Hoy cuando le he dado la mano y le he acariciado, me ha agarrado y me ha pedido encima perdón por el mal momento que nos hace pasar, un perdón desde el alma, un perdón desde el dolor, un perdón totalmente innecesario, cuando éramos los que estábamos allí los que le teníamos que pedir perdón por hacerle pasar el mal rato a él, por moverle, por hacerle comer, por hacerle daño, por cansarle, por no dejarle en paz.
Espero de corazón que Dios, el Dios en el que creo, falle la puntilla y Manolo se levante de nuevo y termine el Cimbelino que tiene terminado, que termine su tesis, y pueda de nuevo ver a su niño. Últimamente las lágrimas brotan de mis ojos con gran facilidad, hoy es un día de esos, pero las lágrimas mas amargas, mas dolorosas, me brotan del corazón, son lágrimas que no se ven pero que uno las siente y siente como van desgarrando el alma por dentro. El dolor no se ve, uno puede ver la expresión del dolor, pero el sentimiento que uno padece solo lo siente el que lo sufre, y la verdad, es que alguien puede sufrir con tu dolor pero nunca sentir tu padecimiento.
Creo que ya me he desahogado un poquito, el teclado de mi ordenador ha sufrido conmigo, algunas de mis lágrimas han accionado alguna de las teclas y han escrito las letras que en ellas llevan impresas, son lágrimas pesadas, amargas y en esta ocasión, vacías de esperanza.

El Juli, un fenómeno. Morante, con ganas. El Fandi, todo entrega. Operación de Hallux Limintus iatrogénico-implante BioPro- No me cabe ni un arroz....

Hoy es sábado 18 de septiembre 2010, no he tenido tiempo de publicar antes esta entrada por falta de tiempo y falta de ganas. Anímicamente estoy un poco tocado, mas que nada por que tengo un amigo en una grave situación y ayer, después de ir a verle al hospital, me vine abajo. son las nueve y media de la mañana, hoy lo voy a dedicar a descansar y a terminar unos trabajos de la segunda tesis, hasta donde llegue y tenga ganas.
La corrida del día 16 ha sido en lineas generales, quitando la se Adelaida, la mejor presentada y las mas igualada pero con un defecto, algunos toros tenían los pitones impresentables. A la salida estuve con Olga, la mujer de Teodoro Matilla, y le di la enhorabuena por el juego de alguno de sus toros y fijaros como es la cosa, que los mismos ganaderos no están del todo satisfechos con el juego de los mismos, lo cual quiere decir que son exigentes, no como algunos ganaderos, que les sale un toro mediocre y presumen y se vanaglorian de que el toro ha sido extraordinario cuando no ha sido mas que una sardina bobalicona, noble y que ha repetido tres veces seguidas sin haber ido al caballo y queriéndose ir. Ha saltado al ruedo un sobrero de Torrealta que ha sido mas bravo pero no tonto, nada fácil para el torero, como muchos piensan. El toro ha sido bueno, pero en otras manos no hubiese lucido tanto, que nadie se equivoque, ese toro era para un torero que lo entendiese.


Morante ha estado con ganas pero no ha tenido un lote propicio. Ha dejado apuntes de su toreo pero sin profundizar y sin romperse de verdad. Para mi es uno de los mejores toreros que he conocido pero en esta feria no ha podido ser. Creo que igual que en la primera tarde la gente estuvo un poco injusta al pitarle una faena, en esta le han demostrado el cariño que le tienen en Salamanca. En esta corrida solo hemos visto retazos superficiales de su arte.












Así me gusta ver la Plaza de Toros de Salamanca, La Glorieta, casi llena de gente. Tenemos una de las plazas de toros mas bonitas del Mundo.







































































































El Juli ha estado en maestro en los dos toros, y ninguno de los dos fueron fáciles. El segundo fue un regalito con el que estuvo en figura, en un verdadero maestro del toreo. Este torero, el cual, como he dicho en anteriores ocasiones, no es de mis preferencias en cuanto a gustos artísticos, me ha terminado de convencer y de convertir en su partidario, no como gran artista, sí como gran torero. El Juli me ha sabido convencer, siempre lo admiré pero siempre me pareció un toreo un tanto vulgar, con poder, con gran técnica, pero sin chispa ni gracia; hoy en día, me descubro ante él.
























































El Fandi es un torero que tiene un gran mérito pero que a mi no me gusta como torea, pero ojo, sin restarle méritos ninguno. Me gusta el toreo ortodoxo, con arte, profundo, con sentimiento, con torería. Creo que el Fandi carece de todo eso, pero su entrega, su predisposición, su afán de agradar y de superación hace que esté donde esté y que lo admire por ello. Pone unos pares de banderillas portentosos, ganándole los terrenos al toro cuando se le viene encima a una velocidad de vértigo, ganándole la cara al toro corriendo hacia atrás, parándolos cuando nadie lo espera; eso tiene un mérito enorme y no lo hace nadie no por que no sea correcto ejecutarlo de esa forma, sino por que nadie puede, nadie lo hace como él, ninguno tiene esas facultades. Pepote Bienvenida, Montoliu, Corbelle, etc. etc, eran grandes banderilleros, muy ortodoxos, pero muy limitados a lo mismo. Si hoy en día Pepote Bienvenida o Montoliu banderilleraran contra el Fandi, no tendrían nada que hacer pues la gente quiere espectáculo, quiere otra cosa. Yo valoraría a los tres, pero después de ver a el Fandi, el público se aburriría con los otros, no os quepa duda. ¿Podría competir en un cartel solo de banderilleros Rafael Corbelle por ejemplo con el Fandi y con Esplá o con Ferrera?...........




























Al final de la corrida hice esta foto con la plaza de toros y La Luna en lo alto, viendo la corrida y esperando que fuese yo el que estuviese toreando, por que eso, es lo que a mi me hubiese gustado. Amo el toreo, soy un apasionado de los toros y sigo con ansias de seguir toreando aunque solo sea para mi. Los tentaderos, cuando toreo, me sirven de mucho, pero de vez en cuando tengo que ponerme delante de un novillo o de un toro para sentirme, para sentir esa sensación que solo algunos experimentamos.


Ayer realizamos dos intervenciones realmente complicadas. Una de ellas fue a un paciente venido desde Asturias el cual había sido operado dos veces de ambos pies, como comenté en anterior entrada. Presentaba un Hallux límitus yatrogénico que no fue nada fácil solucionar pero pensamos que la intervención ha sido un éxito. Le hemos puesto un implante BioPro y le hemos realizado un Austin de brazo dorsal largo y plantaflexor. Como no tengo mucho tiempo, solo pongo parte de las fotos de la intervención, y en otra entrada próxima, cuando tenga todas las fotos que realizó mi hermano pasadas al ordenador, pondré una secuencia de la operación paso a paso. En las fotos viereis en el estado que estaba el chaval, con una pseudoartrosis brutal. No es extraño que el pobre hombre estuviese desesperado, con depresión y con gran miedo e incertidumbre. Según me ha contado, y según hablé con su mujer, lo ha pasado realmente mal, hasta se le saltaban las lágrimas de los ojos. Espero de corazón que el resultado sea satisfactorio. Esta intervención la hicimos dentro del programa de Podología en la Calle dentro del Congreso Nacional de Podología. Le doy las gracias a José Luis Fernandez Lago, presidente del Colegio de Podólogos de Asturias y Secretario General del Congreso, por su confianza y haberme elegido a mi y a Juan Carlos Goez para solucionar este caso.

























Este es el implante de prueba.


En la intervención estuvieron presente mi hermano Antonio y la compañera Rocío.













Impactando el implante definitivo.



Remodelando la cabeza del primer metatarsiano.














Fijando la osteotomía A-Y con aguja K.



Suturando











Llevo unas Ferias y Fiestas de Salamanca en las que no he parado bajo ningún concepto, a la plaza de toros por la mañana a los sorteos, luego por la tarde a ver la corrida de toros, y por la noche, a los coloquios taurinos. Entre toros y toros, comidas y cenas, estoy tan lleno que no me cabe ni un arroz parao, como dicen los colombianos. Creo que he engordado unas cuantas libras pues entre ir al Asador la Maestranza, Casa Paca, La Posada, El Pecado y El Albero, no he dejado descansar al estómago, incluso ayer, que comimos con Juan Carlos Goez en mi casa, Mari Mar preparó un arroz negro con calamares que estaba muy bueno y repetí plato. Por la noche fuimos a cenar al Albero invitados por Juan Carlos y la cena estuvo fenomenal, Pedro, el dueño del Albero en esta ocasión se portó, como se debe de portar siempre y no a veces. Unos puerros macerados a la mostaza como siempre, buenos, una buena ración de foie para tres personas extraordinaria, adviertiéndole previamente que foie para tres; y carne a la brasa muy buena. De postre una tarta de queso con moras y nata con nueces y los chupitos. El restaurante tenía lleno hasta la bandera. En el restaurante me encontré con Andrés Sanchez, matador de toros de Salamanca, buen torero que por unas causas u otras no llegó a lo que todo torero aspira, ser figura del toreo, pero que realmente toreaba muy bien. Andrés es un gran tipo, lo conozco desde niño, cuando yo era novillero y él aún no toreaba pero ya empezaba con el gusanillo de los toros, le tengo gran aprecio. En estas ferias no sé como me las he arreglado pero me han invitado a comer y cenar todos los días que hemos ido de restaurante, no he tenido opción de invitar, es mas, ayer tuve que dejar una invitación en Casa Paca, invitado por el periodista Santiago Juanes, el cual me llamó para entrevistarme junto a Pablo y a Jose Martin, pero no pude ir. El Domingo pasado me llamaron del programa del periodista Pedro Javier Cáceres para hacerme una entrevista y que diese mi opinión sobre la feria. Ahora vienen las reuniones de los jurados para conceder los trofeos de la feria taurina, creo que soy miembro de tres jurados, y espero que no me llamen de ninguno mas, mas que nada por falta de tiempo, no por otra cosa.
Manolo, el Rubio de la Glorieta, no termina de entonarse. Después de la operación mejoró un poco, pero ha vuelto a recaer. Espero que supere este terrible bache en el que se encuentra, no es la primera vez que lo logra, habiendo tenido mas de media estocada en los costillares. Ánimo Manolo, estamos contigo, vente arriba como los toros bravos, no dejes que este toro negro te venza en estos momentos. Me voy a la clínica que tengo que hacer curas a paciente operados el miércoles y el jueves y no me queda mas remedio que hacerlas hoy sábado.