Querido amigo Julio:
Ayer recibí tu carta de dimisión como Presidente de la A.E.C.P., carta que no sé por qué, estaba esperando, por lo cual no me llegó de sorpresa, pero no por eso, dejo de llenarme de pena e hizo huella en mi. Nos das las gracias a muchos podólogos, nombrándonos en tu misiva, pero somos nosotros, tanto los nombrados como los no, los que te tenemos que dar las gracias a ti. En todos estos últimos años, tu has sido el alma y el motor de la Asociación Española de Cirugía Podólogica, tu has elevado a nuestra asociación a un estatus que nunca ha tenido, la has puesto en un nivel que muchos ni siquiera se han dado cuenta de ello; has hecho que el prestigio de la Cirugía Podológica esté en boca de todos los que realizan cirugía del pie, incluso de los que no la realizan, has conseguido el mayor número de asociados permanentes en toda su andadura; la calidad de los cursos que se han organizado durante tu mandato, han sido de lo mas relevante a nivel nacional, y los Seminarios Internacionales, no han sido superados por ningún curso, máster, experto, etc, en cuanto al nivel científico y docente. Los prácticum sobre cadáver, han sido de los mas demandados del panorama quirúrgico en toda España y los cursos de inicio a la cirugía que has organizado por diferentes zonas de la geografía española han sido todo un éxito.
Dices que gracias a todos los que nos nombras has podido realizar muchas cosas, pero yo, desde mi humilde opinión, desdigo tus palabras y os aseguro a todos los que podáis leer esta carta, que el único que ha luchado en cuerpo y alma, el único que se ha preocupado diariamente, el único que absolutamente solo, sin apoyo de casi nadie y sin apenas dormir y sacrificando enormemente a su familia por sacar adelante todos los proyectos de la Asociación, el único, ha sido Julio López Morales, que para mas cojones, es Salmantino.
Julio ha sido en estos últimos años, la ASOCIACIÓN, la junta directiva que hemos estado con el, nos hemos encontrado todo hecho, hemos figurado, pero poco hemos actuado, al menos yo, o a mi eso me parece. No se que pensarán los demás miembros de la junta directiva, pero si no es por Julio, poco hubiésemos hecho.
En Madrid me insinuaste, y ya me lo has insinuado en varias ocasiones, que por qué no me presento yo a la presidencia de la Asociación, a lo cual te he contestado varias veces que no , que no tengo ya la capacidad de trabajo que tu has tenido, que no tengo tiempo, el tiempo que tu le has dedicado altruistamente en beneficio de la podología, que no tengo ánimos de estar al frente de ningún organismo podológico, que después de estar varias legislaturas como presidente de la Asociación Castellano Leonesa y siendo miembro de la Federación, uno termina quemado y luego pocos saben agradecer la lucha y los malos momentos que se pasan, momentos por los que tú, me imagino estás pasando ahora.
Julio, me gustaría pedirte que reconsideraras tu postura, pero con mi postura, no tengo capacidad moral para hacerlo; pero si te sirve, espero que recapacites, que lo pienses bien, que si tu lo dejas, será difícil que la Asociación alcance tan altas cotas como contigo. Tu me pediste que formara parte de tu junta directiva y en principio me negué, pero me convenciste y acepté por que creía y creo en tu proyecto, ahora quiero seguir formando parte de tu junta directiva, si a ti no te importa.
Una cosa si te digo, si la Asociación se va a interponer mas en tu vida privada y a sacrificar mucho mas a tu familia, como amigo, te deseo lo mejor, y por lo tanto, lo que deseo es que seas feliz.
Un fuerte abrazo PRESIDENTE.