Hay hombres que nos inspiran el deseo irresistible de molestarles: aquellos cuyas virtudes no compartimos.
He podido comprobar que Grahan Greene tenía razón cuando pronunció la anterior sentencia. Hablando con varios compañeros de Madrid, Andalucía, Canarias, Valencia, también ellos han podido experimentar algo parecido a lo que algunos compañeros han querido hacer conmigo, simplemente "molestarme". Ellos han visto como compañeros de su entorno, incluso compañeros muy allegados, han intentado fastidiarles y desacreditarles, parece que es un mal de esta profesión, pero no, es de casi todas las sanitarias. Ayer, oí al Doctor Cavadas por la radio y a él también han intentado cortarle las alas, pues dice que a todo aquel que destaque en su profesión, los enemigos le saldrán de su entorno mas cercano, incluso de personas a las que consideras y aprecias. Dijo que la envidia es un don innato del ser humano, un don que no deja vivir al que la padece pero que a veces te hace daño cuando intencionadamente el envidioso es allegado al envidiado, "amigo" o conocido.
Durante la primera quincena de Agosto en la que no he publicado nada, me han llegado numerosos comentarios, y uno, que dice ser de Cáceres (es de Plasencia, mas concretamente) me recrimina que le he querido cobrar 1500€ por estar un mes en mi clínica aprendiendo lo que no sabe. Querido y desagradecido "tontolava", pudiera decir tu nombre en el blog, pero no te voy a descubrir, no te preocupes, ya que el comentario lo hiciste como un anónimo, así te voy a tratar. Eres un mierdecilla de Plasencia que se puso en contacto conmigo para venir a mi clínica y estar una temporada viendo cirugía, y de paso ver como realizamos los estudios biomecánicos y la confección de soportes plantares, prótesis, ortésis, ver como quitamos los papilomas, etc. Eso es lo que me dijiste, por lo que deduzco que no tienes ni idea de nada. Te comenté que ahora no podía ser porque tengo muchos compañeros esperando para venir y en estos mismos momentos ya tengo en la clínica grupos hasta el mes de Abril del 2009, pero que si alguno de los compañeros que están actualmente con nosotros no podía asistir cierto día a una cirugía, que te llamaría para que vinieras y la vieras, sin cobrarte nada, pero que cuando vinieses en Abril, te cobraría 1500€. Me dijiste que no disponías de dinero y te dije que no te preocupases, que me lo pagases como pudieras, sin ponerte fechas, tiempo ni cantidades; un día te llamé para que vinieras a ver un juanete y no podías ese día por que tu padre no te podía traer, y ahora desagradecido mierdecilla ¿me quieres tocar las narices?. Dime, ¿cuantos cursos conoces gratuitos de postgrado?, ¿en cuántos de ellos te ofertan lo que yo te he ofrecido?, ¿qué Universidad imparte gratuitamente sus enseñanzas?......y ahora, tu me pides que lo que yo he aprendido con esfuerzo, mucho,mucho trabajo y el gasto de muchísimo dinero y muchas horas de estudio, ¿te lo enseñe gratis a ti que ni siquiera te conozco personalmente?, vete a freír monas so pánfilo. Como vuelvas a incordiarme, diré públicamente quien eres y ahí va una pista: estudió en Plasencia, coincidió con un alumno salmantino y es un pequeño payasete allegado al pimentón. Sin embargo, hay compañeros que entienden mi postura y es más, dicen que cobro poco. Me han convencido, a partir de ahora cobraré a todo el que quiera venir 2000€ al mes, menos a los que ya están apalabrados y esperando su turno.
El último comentario es de un compañero que utiliza el seudónimo de El Tío Miseria y dice que quiere venir días sueltos. Tío Miseria, cuando regrese de vacaciones ponte en contacto conmigo y hablamos, pero de momento está un poco difícil la cosa pues tengo todo completo con otros compañeros, pero si alguno no puede asistir algún día, tienes mi Clínica abierta. Solo podrían ser días en los que los demás no puedan, pues el que está de contínuo tiene preferencia, pero a lo largo de un mes fallan mas de una vez, pues suelo tener a tres compañeros cada mes.
Contestación a María Peña García: María Peña es una señora que hace un comentario en mi anterior entrada y dice que tiene una fascitis plantar, que ha ido a varios compañeros podólogos y que estos le dicen que esto no es tema suyo, que vaya al traumatólogo (es deprimente). Ha ido a un traumatólogo y le ha dicho que vaya a un podólogo a hacerse plantillas, pero nuestro compañero lo remite a una ortopedia (mas deprimente aún). La mujer dice que el tema de los podólogos le desconcierta, y no le falta razón, si a mi me pasa eso con un podólogo, no sé ni que pensaría. Desde luego dentro la profesión tenemos a unos cuantos que la están tirando por los suelos y la están menospreciando. No son los pacientes quienes nos menosprecian sino los propios compañeros que no tienen ni idea de las posibilidades de su profesión o que se acomodan en la quiropodia y con ganar cuatro duros para ir tirando van jodiendo día a día a la podología. No estoy en contra de los que solamente realizan quiropodias, estoy en contra de los que cuando les llega un problema que ellos no saben o no pueden solucionar, en vez de enviárselo a otro podólogo, se lo mandan a un traumatólogo o a una ortopedia. Esto no es grave para la profesión , es gravísimo. Señora, vaya usted a un podólogo en condiciones e intente que le resuelvan su problema de la mejor forma posible. Busque un buen podólogo, que son la mayoría, y seguro que le aliviaran su patología. Ha tenido mala suerte con los compañeros a los que ha ido, seguro que son los peores, ahora quedan el resto; asesórese de uno y acuda a él sin miedo, y si no, mi clínica la tiene usted abierta, pero......milagros no hacemos.
Una enfermera llamada Sonia escribió un comentario hace tiempo con similares características, ahora realiza otro en la anterior entrada en la cual me pone que ha ido a mi clínica y ha atendido a su madre mi hermano Antonio. Sonia, me alegro que su madre esté mejor y lo de que la podología cambie está un poco complicado aunque se intentará. Por lo menos muchos compañeros intentarán ser unos profesionales íntegros, no como a los que su madre acudió anteriormente. Eso no quiere decir que los problemas se resuelvan, pero que por lo menos que se ponga interés en el tema y se haga todo lo posible. Muchas gracias por sus elogios.
Dar las gracias a los pacientes que han escrito comentarios y que me alegro que se encuentren bien, desgraciadamente no todos están como ustedes aunque si la mayoría. Realmente tengo tres pacientes que me tienen preocupado, por eso estoy hoy aquí, por lo cual las noticias de ustedes que me dicen se encuentran bien me satisface enórmemente.
Durante mis primeros día de vacaciones me he encontrado a una chica de Valladolid y a su marido en las costas gaditanas. A ella la operé hace unos dos meses de una fascitis plantar. También me dio alegría verla y la satisfación de decirme que se encuentra bien. Toda una casualidad.
Los demás comentarios, los podéis leer si queréis, a unos, se lo agradezco, a los demás, que os den amargaos, que cada vez que escribís, se os ve la amargura en cada letra.
Ahora corto y regreso a mis vacaciones. El jueves voy a la feria de Bilbao a ver las últimas corridas, o sea, las mejores. Mi amigo, el matador de toros Gonzalo Gomez Guadalupe me ha invitado a ver las corridas en las que torean Enrique Ponce, Morante de la Puebla y Sebastián Castella, casi ná, y la de el viernes con El Cid, Manzanares y El Gallo, otro buen cartel. Nos iremos un día ha cenar al Ercilla con Morante, "obra cumbre".