El diario de mi Clínica prácticamente dia a día. Comentarios y problemas con los que me encuentro, patologías que se me presentan y otros temas podológicos o que no vienen a cuento. Por que me da la gana.

jueves, 14 de septiembre de 2017

Orejas en demasía para toros toreables. A hombros El Juli y Juan del Alamo.

 Corrida de toros de Garcigrande de muy desigual presentación, sin cara y sin presencia para Salamanca. Todos los toros en general toreables con matices pero ninguno completo.

Primer toro, tercioado, con pocas fuerzas pero noble y toreable, insulso, soso, sin emoción. El Juli con el estuvo bien, midiéndolo, templándolo y cuidándolo. Faena pulcra sin mas que poder hacer ante un toro que no pedía mas.
 Segundo toro chico, sin cara, sin trapío, manseando pero noble y repitiendo pero saliendo muchas veces distraído. El toro fue a mas. Juan del Alamo estuvo bien, mas en novillero que en matador de toros. Faena emocionante y jaleada, echó las rodillas en tierra y le pegó tandas con emoción y ligazón. Con la izquierda no era para pedir mucho, lo intentó y volvió a la derecha para darle unas buenas tandas, matando y cortando la primera oreja de la tarde.

 El tercer toro fue manso pero sin peligro, noble y con algunas embestidas de calidad pero sin cantidad. Se quería ir a querencia y allí terminó.
Roca Rey lo intentó pero no profundizó y estuvo bastante vulgar. Decir que con el capote estuvo bien, variado y con emoción.
 Cuarto toro sin cara, noble, con calidad, humillando pero justito de raza.
La cuadrilla de El Juli pegó un petardo con banderillas y capotes.
El Juli estuvo muy bien con el pero un poco despegadito. Le pegó tandas muy meritorias y templadas con la mano derecha, buenos pases de pecho y pases por alto de desprecio. Naturales largos y templados, cambios de mano y todo con mucho temple y cadencia, llevando muy toreado siempre al toro. Cortó dos orejas que pienso podrían haber sido solo una.
 El quinto toro de la tarde ha sido una máquina de embestir, encastado, repetidor, con el morro por los suelos y con mucha emoción, un toro realmente bravo. Fue muy bien al caballo pero solo lo pusieron una sola vez, no pegándole en el caballo, lo cual lo sufrió Juan del Alamo en la muleta, el cual se vio desbordado por el toro. El toro no era tonto, no era un bombón, había que poderle, llevarlo muy toreado y con mando y en muchos momentos reponía muy rápido, lo cual le complicaba a del Alamo su labor. 
Juan estuvo voluntarioso, pegándole muchos muletazos por la mano derecha, con emoción pero sin sometimiento ni mando. Juan del Álamo no estuvo mal, estuvo con tesón, hizo un gran esfuerzo, pegó muchos muletazos pero había mucho toro que torear y esos toros, te dejan sin pulmón, no ves como quitártelos de encima. Por la izquierda lo intentó pero el toro era mas complicado y desistió. Cortó dos orejas que pienso bien, pudo haber sido una.
 El quinto toro era feote, con poca cara, como todos, bastote, noble y con poca fuerza. Fue a menos y se terminó pronto. El peor lote se lo llevó Roca Rey pero este no estuvo en su mejor momento. Con el capote estuvo muy bien, variado, vistoso y con mucha emoción.
Con la muleta estuvo voluntarioso pero vulgar, toreando hacia fuera y despegado. Con la mano derecha mandaba al toro para el barrio de Miraflores en Lima y con la izquierda no pegó ni un solo muletazo limpio saliendo todos enganchados, en fin, no fue su tarde.