El diario de mi Clínica prácticamente dia a día. Comentarios y problemas con los que me encuentro, patologías que se me presentan y otros temas podológicos o que no vienen a cuento. Por que me da la gana.

miércoles, 24 de junio de 2009

Gangrena. Nos engañan como a chinos.

En el blog de Quirós, un valiente de la podología que se escuda en un anónimo, tira la piedra y esconde la mano y escupe en la nuca de las personas dándole las espaldas, ha escrito el siguiente comentario, no exento, en parte, de razón, pero que en otros apectos la picia. Yo, como mercenario de la podología, según el, voy a contestar suave y diplomáticamente en mi blog, no en el de Lorenzo.

Querido anónimo podólogo/a, el mercenario que a continuación escribe, se introdujo en el mundo de la podología hace mas menos, veinte años. Ya entonces, cuando pedí a ciertos compañeros que me enseñaran lo que no había aprendido en la Universidad, me pidieron dinero por ello, algo que entonces no entendía y que hoy comprendo perféctamente, otros en cambio, me dieron con las puertas literalmente en las narices; por el contrario otros, gracias a las amistades de mi padre, me abrieron sus puertas de par en par. Hice muchos, muchísimos cursos de postgrado, aquí y en Estados Unidos, algo que sigo haciendo a pesar de los años transcurridos como profesional, pues en una profesión sanitaria, los avances y la nuevas técnicas fluyen como los torrentes y hay que estar al día si no quieres que el caudal se seque rápido. Este aprendizaje requiere, además de un enorme gasto de dinero, tiempo, mucho tiempo, horas, muchas horas de estudio y de dejar de realizar las cosas que uno quisiera y le gustan, entre ellas, estar mas tiempo con la familia, así como dejar tu trabajo y por ello, dejar de ganar una cantidad muy apetecible de dinero, dinero que es difícil volver a recuperar. Yo he recibido en mi clínica, (sobre todo al principio, hace ya varios años que no lo hago -solo a amigos-), a muchísimos compañeros que se han tirado temporadas viendo y aprendiendo sin que les cobrase una sola peseta (entoces eran pesetas) por ello. He enseñado gratuitamente y sin ánimos de ser recompensado por ello a montones de compañeros, algunos de ellos, los cuales ahora no te miran ni a la cara, te traicionan, te menosprecian y te difaman. Ante esta serie de actitudes que vas viendo a lo largo de los años, tome la decisión de cobrar a todo aquel que quisiera estar conmigo en mi clínica aprendiendo a realizar soportes plantares, a quitar papilomas, a realizar estudios biomecánicos, a operar, a saber diagnosticar, etcétera, etc., etc.,.....algo que se debería de aprender sobradamente en las universidades, pero que parece que la mayoría de los estudiantes no aprenden, ya que por lo visto, la mayoría de las universidades donde se imparte podología, andan cojas. Algo falla, amigo mío, para que el personal esté dispuesto a pagar a un compañero por aprender y no se decida a gastarse el dinero en cursos de postgrado. ¿Cómo voy a enseñar yo gratuitamente todo lo que he aprendido después de las ingratitudes recibidas, del tiempo que he invertido y del dinero que me he gastado?. El que quiera aprender que pague la enseñanza, ya que la enseñanza no es gratuita en ninguna parte. Si hacen un Master de dos años, les cuesta 18.000 €, si hacen un Master de un año pagan por ello 9.000, un curso de postgrado de lo que sea, aunque solo te concedan 30 créditos por el, te cuesta 4.000 € siempre que sea un poco decente, y a pesar de todo, el alumno, sale como en un curso de grado ( exceptuando algunos postgrados que realmente merecen la pena). Los alumnos de postgrado se quejan de que siempre, es mas de lo mismo, repetición de la teoría dada en la carrera, falta de experiencia docente, falta de prácticas, y mucho, mucho dinero.

Por supuesto, yo, como buen mercenario, según tu, y que conste que no me he sentido eludido, pero si aludido, me doy cuenta que deontológicamente, hago lo correcto y me aprovecho de ello, y los compañeros, no se por qué, cada día me llaman con mas asiduidad para que les robe vilmente y sin ningún tipo de escrúpulos a cambio de enseñarles lo poco que sé.


A continuación, el comentario que el anónimo dejó en el blog del compañero Quirós.


Por Podologo/a
Muy original la foto, pies unidos, juntos, tocándose, lo que sin duda indica la unión y confianza existente de los podólogos en esa reunión, muchas personas juntas de la misma profesión, y además de ambos géneros...haciendo piececitos.Da envidia.....Antes, hace unos años la Podología era así, mas o menos, bastante unión entre los profesionales, clínicas abiertas para el que las quisiera visitar, y así pudiera aprender.Se daban cursos gratis expuestos por compañeros, se hacían comidas gratis con el dinero generado de la cuota que se pagaba en las asociaciones, y nos lo pasabamos de puta madre.... la podología era así...De un tiempo a esta parte han llegado mercenarios, mesnaderos de la podología, los aprovechados que ven el mercado en sus propios compañeros...que triste, que falta de deontología profesional, que tenía que ser expedientado el que se aproveche económicamente de otro compañero por el CONSEJO NaCIONAL de PODÖLOGOS....Ahí Virginia debe actuar...a donde conduce esto....Enseñanza si, pero desde la Universidad, desde profesorado titulado universitario..desde la legalidad...Podólogos sin escrúpulos !!!DESAPARECED¡¡¡¡¡¡¡El que se sienta eludido que se de cuenta de su poca deontología profesional.Viva la Podología.....Cada vez mejor, ya nos queda poco para triunfar, 240 créditos, y lo que está por llegar.....Feliz verano, salud, y a ser cada vez mas importantes para la sociedad....Jose luis, La foto es genial, sin duda realizada con Leica por la calidad de la óptica.Este J.Luis tiene ideas originales.Suerte para todos...


Nos engañan como a chinos, ya no sabemos lo que es auténtico y lo que no. He atendido a un paciente de Montanchez que me ha contado una historia un tanto peculiar, mas que nada por darse el caso en Extremadura, tierra de cerdo ibérico donde las haya. Esta historia ya la conocemos todos por los vinos de diferentes regiones y por otros productos como el queso y demás; el caso es que me contó, hablando de jamones, que muchos de los jamones que se vendían en Málaga, y otras partes de Andalucía, con la denominación de Montanchez, eran de cerdos procedentes de Galicia, lo cual hace un flaco favor a la industria jamonera extremeña, sobre todo a la de la zona citada. Si hacen eso, por lo menos, que no citen a esos jamones como de Montanchez, ya que ni la calidad del cerdo (por muy ibércio que sea de raza) gallego ni de los pastos (muy buenos para las vacas pero no para el porcino) gallegos, se acerca ni lo mas mínimo a la calidad de los pastos de las dehedas extremeñas ni a los cerdos cacereños, con lo cual, están desprestigiando su propio producto. Lo mismo pasa con los vinos riojanos, gallegos, jerezanos, catalanes, los quesos cántabros, baleares, del pirineo, etc., etc.







Juan Manuel, entre mi padre y yo, al lado mi hermano, en una de las salas de la clínica.















Juan Manuel es una persona con grandes ansias de saber, se pasaba ratos enteros viendo casos en el ordenador de mi despacho.



Juan Manuel junto al fluoroscopio









Como ya he comentado en entradas anteriores, uno de los días tuvo la oportunidad de ver a un paciente con gangrena en el primer y segundo dedos. Aquí pongo la secuencia desde el primer día que le vi hasta que la necrosis fue acentuándose hasta gangrenar los dos primeros dedos.

















El paciente llegó en este estado por primera vez a mi clínica. El hombre estaba dejado de la mano de todo profesional, aunque la verdad, poco se podía hacer, pero si intentar que su patología no empeorara. El hombre es un paciente vascular y le mandé a uno de los cirujanos vasculares con los que suelo colaborar, o ellos conmigo mejor dicho, y el informe no fue nada esperanzador. No se le podía realizar una recanalización arterial ni ponerle un stent, y no aconsejaba para nada la amputación. El pronóstico fue que la pequeña necrosis distal que presentaba se podría transformar en una gangrena, seca o húmeda, dependiendo como actuemos ante el paciente. La infección que presentaba nos hacía temer lo peor, pero cogimos muestras para cultivo y antibiograma que enviamos a bacteriología y nos dio que era sensible al ciprofloxaciono y a la amoxicilina, pero debido a los tejidos isquémicos savíamos que los antibióticos de poco nos servirían pues no penetraría el fármaco en los tejidos. Decidimos tratarlo con atibióticos y dejar evolucionar la zona a ver si progresaba a gangrena seca y los dedos se auto-amputen (desprendan), no permitiendo que evolucionara a gangrena húmeda.
Parece que vamos consiguiendo el objetivo y y los tejidos necróticos se van momificando, esperando que con el tiempo al desbridalos se caigan por si solos.












En estas secuencias podemos ver el proceso que ha padecido el paciente a lo largo de mes y medio desde que lo vi con necrosis distal de la punta del primer dedo.







Posteriormente se le fue gangrenando el segundo dedo.






Este es el estado actual del paciente, el cual, comienza con una posible gangrena, también en el tercer dedo.






















Pienso que dentro de unos veinte días, el primer dedo, lo tendré suelto entre mis manos.









Como comenté ayer, hoy he operado a un paciente de Valladolid de Tendinitis de Aquiles con el Topaz, espero haberle solucionado el problema, por lo menos para poder realizar una vida normal, aunque no pueda volver a practicar el kárate, algo que a el le gustaría. Tenía la zona muy fibrosada y degeneración en el tendón, ya que le habían realizado varias infiltraciones en el tendón de Aquiles, algo que no se debe de hacer nunca. Ya pondré las fotos mañana o pasado. Como dije, el quirófano, "petado" de compañeros queriendo aprender, les cueste lo que le cueste. Por otro lado, esta tarde, vino otro paciente operado con Topaz hace seis meses de una fascitis plantar, es uno de los pacientes que me tiene preocupado pues el Topaz de momento no ha resultado, es mas, le han salido una serie de nódulos en varias de las zonas de punción, cosa que me ha sucedido por primera vez y que he puesto en conocimiento para que Juan Carlos y Emilio Goez me den su opinión y una respuesta al caso. Es como una especie de quistes o fibrosis que no son dolorosas a la presión ni al pinzamieno, pero que cuando el paciente permanece rato de pie, le resultan muy dolorosos incluso al masajearlos suavemente.